PERIODONCIA
Casi nunca duelen y por eso no se suelen cuidar como es debido. Si mantienes tus encías en buen estado, evitarás complicaciones como la gingivitis y la periodontitis, que son las primeras causas de pérdidas dentales en adultos.
Pero, si no duelen, ¿cómo puedes saber si hay algún problema en tus encías?
Hay varios síntomas que los evidencian. Los más visibles son el sangrado y el movimiento de las piezas dentales, pero si tienes los dientes cada vez más largos o se han abierto espacios entre ellos, podrías estar sufriendo una enfermedad periodontal.
Manteniendo unas encías en buen estado no solo estarás cuidando tu salud bucal, sino también tu salud en general. Puede que no lo parezca, pero las enfermedades periodontales están estrechamente relacionadas con problemas cardiovasculares y dificultades durante el embarazo.
Por norma general, con una limpieza profesional de dientes y encías es suficiente para eliminar la infección. En el caso de las encías, un diagnóstico temprano permite tratar cualquier enfermedad mediante tratamientos poco dolorosos y mínimamente invasivos.
Si la limpieza no es suficiente, se realiza una leve intervención quirúrgica para realizar una limpieza más minuciosa y evaluar el estado del hueso. En caso de que sea necesario, realizamos injertos o drenajes para evitar la pérdida de dientes y recuperar la salud bucal.
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